La principal aerolínea nacional de Rusia, Aeroflot, declaró la intención de participar en un concurso de privatización en que se disputará el 91,5% de la compañía aérea checa Czech Airlines (CSA).
Una empresa checa que actúa en beneficio de Aeroflot cursó la respectiva solicitud que esboza a grandes rasgos el futuro plan de negocios, así como las perspectivas del desarrollo conjunto, y promete preservar a CSA en calidad de aerolínea nacional basada en el aeropuerto Ruzyne de Praga.
La cooperación entre CSA y Aeroflot, una de las más pujantes aerolíneas europeas, permite "lograr un efecto sinérgico que permitirá a las dos empresas ampliar notablemente la escala de sus actividades y elevar la rentabilidad", consta en la nota de prensa emitida este lunes por la compañía rusa.
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