El Juzgado Municipal de Moscú ha condenado a la moscovita Irina Zbarskaya, de 65 años de edad, a 6 años de prisión por intento de organizar un asesinato por encargo, informa RAPSI.
Según la información del periódico “Komsomoslkaya Pravda”, Zbarskaya es directora de una fundación benéfica para el apoyo de la tercera edad y tiene dos hijos adultos que poseen muchos ingresos. La pensionista de Moscú tenía una relación amorosa con un hombre de 50 años que conoció 10 años atrás, cuando la acercó a casa con el coche. El hombre poseía una empresa de venta de cigarrillos y tenía una esposa que trabajaba como contable.
Justo después del inicio de las relaciones Zbarskaya empezó a poner notas en el buzón de la pareja: “Dame a mi hombre” y “Por todo hay que pagar en esta vida”. A continuación envió a la mujer del hombre una corona de flores mortuoria. El marido convenció a su cónyuge de que todo se trataba de una confusión de direcciones.
Los investigadores suponen que en 2007 Zbarskaya empezó a buscar a un asesino que estuviera dispuesto a cometer el asesinato por encargo por dos mil dólares. Enseguida se cometió el primer ataque contra la mujer del empresario: fue agredida cerca de casa con un palo metálico. La mujer acabó en el hospital. Zberskaya la visitó allí fingiendo ser una amiga de su suegra y, al marcharse, le susurró al oído: “Nada pasa tan fácilmente en esta vida”. El empresario no sospechó que el ataque hubiera sudo organizado por su amante y continuó viéndose con ella. La mujer del empresario tampoco prestó atención a las palabras de la “amiga de su suegra”.
Se ha establecido que en 2011 Zberskaya de nuevo empezó a buscar a un asesino. Así lo supieron los órganos de seguridad cuando enviaron a la pensionista de Moscú un falso “asesino”. La mujer le dijo que le pagaría cinco mil dólares si mataba a su rival y tiraba junto a ella objetos de un sex-shop, así como jeringuillas con restos de heroína. La pensionista también exigía que el asesino le trajera vivo el perro de su rival. Esta conversación fue grabada con cámara oculta.
Los órganos de seguridad comunicaron a la mujer del empresario el encargo y le pidieron que les ayudara en la investigación del asesinato. En julio de 2011, cuando Zbarskaya entregó al falso asesino el dinero y recibió el perro, fue detenida. El juzgado arrestó a la sospechosa. La víctima potencial del asesinato pidió el divorcio.
RAPSI comunica que el Juzgado ha considerado insuficiente las pruebas de participación de Zbarskaya en el ataque de 2007. Ha sido declarada inocente por este episodio, pero inculpada por el encargo de asesinato de 2011.
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