Una pizzería en la ciudad de Syktyvkar, al norte de Rusia, lanzó un método de entrega poco habitual: los clientes reciben sus pedidos desde el cielo, a través de drones. En la compañía Dodo Pizza aseguran que no se trata de una simple promoción publicitaria sino de un nuevo modelo de mercado. "Ya hemos entregado seis pizzas en apenas una hora y media usando drones”, dijo el director Ilya Farafonov.
El drone se guía gracias a un GPS y unas cámaras integradas, y cuando localizan al cliente le hacen llegar el producto haciéndolo descender con un cable. La operación está supervisada en todo momento desde el local, desde donde llaman por teléfono al cliente para confirmar su identidad. También se ofrece al comprador seguir todo el proceso vía streaming. La operación de compra de la pizza debe hacerse online o por teléfono.
Este tipo de método de entrega solo es posible en espacios abiertos, como parques, pero la empresa espera poder realizar entregas en playas y campus universitarios próximamente.
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