El día 7 de abril los ortodoxos de todo el mundo celebraron la Anunciación. Es una de las 12 principales fiestas cristianas. Según la leyenda, este día el Arcángel Gabriel le anunció a la Virgen María que ella habría de traer al mundo al Salvador. En la actualidad, este día todas las iglesias ortodoxas están adornadas de flores blancas que simbolizan la pureza y la inocencia.
El Patriarca de Moscú y de toda Rusia, Kiril, celebra la liturgia en la Catedral de la Anunciación en el Kremlin y, según la tradición, suelta palomas blancas al cielo en la plaza de la Catedral.
“En la Anunciación empieza la historia de la salvación del pecado por Dios. El símbolo evidente de la pureza y liberación del pecado es la tradición rusa de soltar las palomas al cielo”, contó uno de los clérigos.
Asimismo, el propio patriarca comparó esa antigua tradición rusa de liberar las palomas que permanecían encerradas en las jaulas con la esperanza de obtener la verdadera libertad. El cabeza de la Iglesia ortodoxa rusa aseguró que la garantía de tal encuentro sería la voluntad de dominarse a sí mismo. Y, en conclusión, invitó a los creyentes a aspirar a la verdadera libertad y no confundirla con lemas y consignas.
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