Las bolsas de fondos rusas han abierto el 22 de octubre con fuertes caídas. En los primeros minutos de la sesión el principal indicador, el MMVB, se ha desplomado casi un cinco por ciento hasta los 620 puntos, y el RTS un dos por ciento quedando en 701 puntos. Los índices rusos habían experimentado subidas en las dos jornadas anteriores.
Influyeron en los mercados rusos los inversores de Asia y EE. UU. La víspera empezaron a vender acciones de compañías locales temiendo un descenso en los beneficios de las grandes compañías. Los indicadores americanos descendieron el 21 de octubre entre 2 y 4 por ciento, y el Nikkei cayó un 6,79 por ciento, informa AFR.
A principios de esta semana el gobierno ruso comenzó a introducir medidas para comprar acciones en la bolsa, tal como había informado anteriormente Interfax. De este modo el gobierno adquirió algunos títulos y evitó la caída de su valor. Si el gobierno el 22 de octubre ejecutará alguna compra más, todavía no se sabe.
A pesar de la aguda caída de las cotizaciones hasta ahora no hay amenaza de paro en la bolsa rusa. Se interrumpe la sesión cuando los índices caen más del 5 por ciento. Hasta el momento están en positivo. Por ejemplo, el RTS por unos minutos se alzó un 2,55 por ciento. Esto puede significar que los inversores se desprenden ante todo de acciones de las compañías más grandes, que son las que se tienen en cuenta en el RTS.
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